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Iberia... da miedo sólo nombrarla. Sólo me ha pasado una vez algo parecido en Oslo camino del ártico, y tuve que redistribuir el equipaje de 2 maletas haciendo encaje de bolillos. En Osaka no me dejaban facturar porque mi equipaje de mano pesaba mas de lo normal y no podía redistribuir en el bulto de facturación porque era material fotográfico delicado. La japo del mostrador fue muy amable y me dijo que me facturara bajo mi responsabilidad, pero que quizás no me dejaban embarcar con el mochilón de fotos. No sólo embarqué, sino que dieron a mi mochila un lugar preferente en el portamaletas de la cabina, jejeje. La compañía era la Japan Airlines (JAL). Tenemos mucho que aprender de estos japoneses. Un abrazo Paco
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