PropertyValue
opmo:account
opmo:content
  • LA VIDA EN CUBA no es fácil, se oye decir a través de toda la isla. Queríamos conocerla para desbaratar los tópicos que una y otra vez oímos en España. No quisimos ir a un complejo turístico y alquilamos un coche (carro), un lujo allí, para llegar hasta los pueblos más recónditos con buena voluntad para recoger a la gente que hace autoestop ('hace botella'). Eso sí que nos permitió conocer Cuba, que no es otra cosa que su gente, todos a pie de carretera, obviando las dificultades climatológicas y de transporte con ingenio y optimismo. La mayoría te abre las puertas de su hogar, te habla del periodo especial (que ya dura 12 años), de sus ganas de cambio o de su añoranza del pasado, entre ronsito y ronsito. Y cuentan historias de sus abuelos canarios, gallegos o catalanes, cuando Cuba era casi el paraíso. Y ciertamente es el paraíso. Tiene unas playas lindísimas: en el Atlántico y en el Caribe, y unas zonas boscosas excepcionales: Pinar del Río (Viñales, Soroa) y en la provincia de Granma (Sierra Maestra, Parque de Baconao). Los cubanos (prietos, mulatos o trigueños) son acogedores, amables y simpáticos; algunos tienen al turista europeo como su modus vivendi. En La Habana te venden ron o tabaco, te ofrecen un buen paladar para almorzar o una casa para hospedarse a cambio de unos cuantos dólares: la picaresca como arte de vivir, o de sobrevivir. Temen las amonestaciones de la omnipresente policía. Hay uno en cada esquina en los lugares más turísticos de Cuba. En la capital hay que visitar la famosa Bodeguita del Medio, la catedral, la plaza de Armas. Tomarse un buen jugo tropical: mango, guayaba, piña, plátano... o una cerveza fría Cristal, Tropical, Bucanero o Mayabe. Y probar la comida criolla: arroz blanco con pollo, frijoles y ensalada fresca (habas, aguacate y pepino), y el postre: mango, fruta bomba, piña y un café criollo. Así es Cuba, linda y exuberante, pero no es fásil. La mayoría de sus habitantes trabaja, pero muy pocos ganan más que el equivalente a 20 dólares mensuales. Por eso hay que hacer más para sobrevivir. Y, como dice uno de los grandes carteles dedicados a la revolución, '200.000 niños mueren cada día en las calles del mundo, pero ninguno es cubano'. Y a la vuelta me queda el recuerdo de la gente y la sensación de haber dejado grandes amigos allá.
sioc:created_at
  • 20020223
is opmo:effect of
sioc:has_creator
opmopviajero:language
  • es
geo:location
opmopviajero:longit
  • 459
opmopviajero:longitMeasure
  • word
opmopviajero:page
  • 6
opmo:pname
  • http://elviajero.elpais.com/articulo/20020223elpviavje_7/Tes (xsd:anyURI)
opmopviajero:refersTo
sioc:title
  • Tierra adentro en la isla del ron
rdf:type

Metadata

Anon_0  
expand all