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La interpretación italiana del lujo y la exclusividad. El Thesis es el nuevo buque insignia de Lancia, la marca más distinguida del grupo Fiat. Llega con cierto retraso tras una laboriosa puesta a punto y tiene la difícil misión de hacerse un hueco en una categoría dominada por modelos tan prestigiosos como los Mercedes Clase E, BMW Serie 5, Audi A6... Un desafío complicado.
Estética diferente y atrevida
Al igual que el Renault Vel-Satis, el Thesis apuesta por la originalidad para seducir a quienes buscan coches diferentes. Pero en vez de hacer un diseño futurista, Lancia ha reinterpretado los aspectos más distintivos de las berlinas clásicas. Y el resultado es la atrevida carrocería del Thesis, un despliegue de creatividad y soluciones estéticas rompedoras. El frontal tiene un capó muy alto para integrar una llamativa parrilla que recuerda a Mercedes. Y los trazos marcados de las aletas delanteras sirven de base a unos discretos faros en forma de diamante que suavizan la imagen. El lateral es clásico, e incluye una cintura lateral ascendente que termina en un capó trasero también elevado y con un toque macizo y musculoso. Pero lo que más destaca en la zaga son los pilotos: forman una tira blanca que recorre las aletas traseras y provoca un aspecto muy sobrio y curioso.
Este cóctel estético revolucionario da forma a un coche de línea muy diferente a todo lo conocido; pero, aunque garantiza la originalidad, exige asumir a la marca un elevado riesgo porque pone en peligro la aceptación del público, que es la clave del éxito.
Lujo y tecnología en el interior
Tan sorprendente envoltorio va acompañado de un interior también peculiar, que combina toda la elegancia exquisita del mejor diseño italiano con un gran despliegue de tecnologías que incluye los últimos sistemas multimedia.
El Thesis es un auténtico salón rodante, con tapicerías atractivas e impecables, materiales muy cuidados y un diseño señorial. Presenta algunos detalles de acabado mejorables, como los ajustes del salpicadero, y unas suspensiones algo enérgicas que limitan el confort. Pero ofrece todas las comodidas y crea un ambiente muy acogedor que sorprende por su refinamiento. Además, aunque las plazas delanteras son algo limitadas en longitud, es muy espacioso atrás y tiene un maletero correcto.
Cuatro motores y todo de serie
El nuevo Lancia se vende con cuatro motores. Tres son de gasolina: 2.4 20v. (170 CV), 2.0 20v. Turbo (185 CV) y 3.0 V6 24v. (215 CV). Y hay un 2.4 JTD turbodiésel de cinco cilindros y 150 CV.
Todos se venden en dos acabados: Executive y Emblema. Y tienen unos precios altos, aunque los compensan con un equipo de serie espectacular. El primero incluye ya ocho airbags, ABS, control de estabilidad VDC, amortiguación electrónica, tapicería de Alcántara, climatizador dual, conexión automática de luces, limpiaparabrisas y freno de mano (electrónico), faros bi-xenón, ordenador de viaje, teléfono y radioCD con mandos orales, sistema de información Connect con GPS... Y el Emblema (4.300 euros más) añade navegador, tapicería de piel, climatizador con regulación para las plazas traseras, asiento del conductor con memoria... Además hay muchas opciones: techo practicable con células fotovoltaicas (1.600 euros), televisión (2.000), etcétera.
Este impresionante equipamiento encarece el precio y sitúa al Thesis con unas tarifas superiores a las de sus rivales mejor dotados. Y plantea algunas dudas porque la imagen de marca de Lancia no está a la altura de los fabricantes alemanes de prestigio.
Conclusión
El Thesis está pensado para quienes buscan una berlina de lujo diferente. Basa su exclusividad en una imagen y diseño muy peculiares, un interior elegante y un equipamiento espectacular que incluye todos los caprichos. Además ofrece un funcionamiento mecánico correcto, aunque menos refinado que las berlinas alemanas equivalentes. Y cuesta más caro.
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