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Mi querido y respetado amigo Fervic: qué grato es volver a asomarme al balcón de tu Atisbo Sellado. He estado contemplando una a una tus últimas fotos, que siempre me dejan ese sabor a fotografía en estado puro. Hay fotos realmente hermosas. Ésta en concreto, tiene un duende que no sabría definir.\nTe cuento que yo también soy educador y padre de dos mozos de 20 y 16 años. Tienes razón en lo que dices; por supuesto que internet no tiene la culpa de nada, al igual que tampoco la tiene el alcohol, o la marihuana, sino el uso que se haga de él. Ya he comentado que no pretendía abrir ningún debate, sino dejar colgado en el aire algo sobre lo que reflexionar, pues bien sabes que hay padres que no ejercen el más mínimo control sobre sus hijos, ya no sólo en internet, como bien dices, sino en muchos otros aspectos, como el uso y abuso indiscriminado de series de televisión, viedeojuegos, etc. Lo que expongo no son especulaciones, ni las cifras son estadísticas, sino cálculos obtenidos de forma directa, y por la cuenta de la vieja (que es la más fiable) de casos muy concretos y cercanos que conozco. Y el ver la pasividad con que actúan los padres, si es que actúan, es algo que me saca de quicio. Así pues, efectivamente, la culpa del mal uso de la red mientras los hijos son menores, es exclusiva de los padres. Los educadores no podemos irrumpir en el seno familiar para dictar o aconsejar unas mínimas pautas de conducta en previsión de males mayores.\nMis hijos, que están estudiando Empresariales y 1º de Bachiller, respectivamente, aún no han necesitado internet absolutamente para nada, y la verdad es que no he tenido que dictar norma alguna, pues apenas hacen uso de la red.\nClaro que internet tiene muchas cosas buenas; por ejemplo, me sirve para mandarte un fuerte abrazo, de tu incondicional amigo, el idiota arrepentido.
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