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Es cierto que todo viaje tiene un coste económico. Por tanto, desde esta premisa, si no tienes este mínimo no puedes viajar. Pero no solo no puedes viajar, es que no puedes salir del pueblo donde has nacido o si vives en una ciudad, no puedes moverte por ella. Es cierto también que esta situación, aunque límite, se da en algunos paises donde hay extrema pobreza. He viajado bastante por Africa, por ahora mi continente preferido, y es obvio, que si no tienen para comer no van a poder viajar. Pero dejando de lado estos casos extremos, donde la lógica se impone y donde lo importante, antes que un libro es tener algo que meterse en la boca, una vez superamos esa fase inicial de tener unas mínimas necesidades cubiertas, el viajar ya no resulta un lujo. He conocido a viajeros que viajaban con un presupuesto bajísimo, durmiendo en playas, misiones eclesiásticas, parques públicos,...que comían cocos y cangrejos o lo que podían obtener con astucia y que su medio de transporte eran sus piernas y su "dedo". Por tanto, estoy de acuerdo que para viajar hay que tener un mínimo cubierto, pero el mísmo mínimo necesario que hay que tener para comprarse un libro. Luego es cuestión de ganas, de ilusión, de necesidad vital. Dejando de lado los casos límite, presentes en algunas sociedades, donde no tienen ese mínimo de educación y alimentos básicos cubiertos, discrepo con la palabra "lujo" para definir el viajar. En nuestra sociedad quien no viaja es porque no le interesa. Siguiendo el paralelismo, hoy quien no lee un libro es porque no quiere ilustrarse ni abrir una ventana a su imaginación. Sigue el debate....
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