sioc:content
|
-
Pues no sabes el peso que me quitas de encima, Milano, pues toda mi vida (parte, quizás) he tenido que oirme, por la mitad de mis conocidos, que estaría más guapo si no opinara objetivamente. Pues todos piden la verdad pero nadie la desea si no es para oir lo que esperan. Ahora que ya tenía la conciencia educada para hablar sólo subjetivamente, va Joaquín y me lo limita. Quizás tenían razón la otra mitad de mis conocidos que afirmaba que estaría más guapo si permanecía callado.
|