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Rosa Niña Guerrera dijo:\nMí querida grandementERUDITamiga llona:\n\nCreí oportuno seleccionar el texto completo de Edgar Allan Poe, en esta entrada múltiple donde ha habido encuentros y desencuentros partiendo de una idea, luego convertida en propuesta y que actualmente trabajo en su etapa final.\n\nTienes razón, la versión del escritor peruano Mamani, es de una belleza negra que desgarra los sentidos, haciendo aullar la imaginación desde sus más hondas entrañas. Ay madre, me adelanto y aquí/allá dejo esta otra versión.\n\nEl cuervo \nPor Porfirio Mamani Macedo \nLo vi de lejos -llovía oscuridad \nsobre su lomo despertaba la noche \nEl cuervo cantó -su voz afónica- venía él \nentre una multitud desenfrenada \nSobre los hombros de la impiedad quise gritar \npero mi voz apenas aullaba de dolor \nquise correr pero el viento se invertía \nNada podía contra la fiebre \nNada contra la muerte \nEl cuervo seguía en pos de mi pobreza \nEra inútil desalentarlo a venir \nMas el pico del cuervo crecía \nNada aturdía el ansia maldita del cuervo \nEl cuervo era negro \ncompletamente vestido de negro alcanfor \ny negra mortaja \nSus garras -su pico- la noche venía \nse venía la noche o la muerte \nSus alas en vuelo rayaban el aire \nVolaba -muy soberbio el animal \n-dije que volaba \narrastrando sus garras -surcando el aire \nYo dormía -tal vez soñaba \nSu pico era curvo -saliente- oscuro \nEl cuervo era un cuervo de alas inmensas \nBrillaban de oscuridad \nParecía un ángel del infierno \nVerdá tuve miedo -horriblemente miedo \nsemioculto mi gorjeo miserable \nluchaba contra mí mismo -por salir de mí mismo \ny dejar el cuerpo envenenado \nEl lo veía todo \nabsorto calmado orgulloso hambriento \nse acercaba dando saltos maderescos \nallí mi cuerpo estirado -moribundo- dormido \nHacia él iba el cuervo \nEl cuervo era grande -selecto- místico y terrestre \nflexionó el pico sórdido y sangricida \n-Soy el cuervo -me dijo- la voz infernal crecía \n-Soy el cuervo y vengo por ti- \ndecía la memoria muerta \nSobre mis huesos vino la sombra \n-Soy el cuervo de la muerte- volvió a decirme \ny la bestia no cejaba ante mis gritos \n-soy el cuervo-soy el cuervo-soy el cuervo \nRampaba el eco abismal de sus profanas intenciones \nYo luchaba -luchaba interiormente \nPero el cuervo a destruirme andaba sempiterno \nAl fin desperté \nCesó la tempestad \ny de un golpe murió el cuervo \n_______________________________ \nAmiga, ya lo dices... el estado borreguil de una inmensa mayoría, me pregunto si acaso sea la consecuencia de que este mundo ande de cabeza. Nuevos líderes y ordenes de gobierno quizá pudiera ser la solución, sin embargo no me parece que así sea... Se que algo está por pasar que sacuda desde sus cimientos a esta humanidad. Pero no me hagas caso...\n\nPor otra parte, decirte que tu más reciente entrada resulta cautivadora por su contenido e intención. Me ha gustado el enfoque que haces sobre caos y orden, como lo manejas... idea clara y directa. FeliciEDADES y que haya más conexión virtual entre los nuestro pensamientos, porque de ti y muchos otros amigos no sólo aprendo, sino que también me inspiro. Gracias.\n\nBesos sin la sombra del cuervo, querida amiga. \nRosa \n\n
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