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No sé si alguna vez les ha pasado a ustedes\npero el Jardín Botánico es un parque dormido\nque sólo despierta con la lluvia.\n\nAhora la última nube ha resuelto quedarse\ny nos está mojando como alegres mendigos.\n\nEl secreto está en correr con precauciones\na fin de no matar ningún escarabajo\ny no pisar los hongos que aprovechan\npara nadar desesperadamente.\n\nSin prevenciones me doy vuelta y siguen\naquellos dos a la izquierda del roble\neternos y escondidos en la lluvia\ndiciéndose quién sabe qué silencios.\n\nNo sé si alguna vez les ha pasado a ustedes\npero cuando la lluvia cae sobre el Botánico\naquí se quedan sólo los fantasmas.\n\nUstedes pueden irse.\nYo me quedo.\n(M. Benedetti)\n***\nY ahí estás, ahí te vemos, Benedetti,\nentre las sombras del roble y el ciprés...\nTu muerte es luz,\nmirada de nuestras letras y emociones,\ngrito social,\n palpitar de tus poemas\nmientras caminamos entre nuestras malezas...\nUn río,\nun valle,\npor donde el viento \nbate tus sonidos...\nTe escuchamos.\nJusti\n\n
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