PropertyValue
opmo:account
is sioc:container_of of
sioc:content
  • \n\n\n\nEn Bazaruto quería y quería hacer submarinismo, pero me lo pensé tres y quinientas veces, y finalmente opté por hacer snorkel. ¡¿Vete tú a saber por qué?! Pero lo pensé mucho antes de partir y durante el viaje. Decidí que tengo que hacer un curso de reciclaje de buceo como con el coche;)\n\nLa cuestión es que el snorkel para nada me defraudó. Pero me lancé con tantas ansias al arrecife de coral que iba como loca. Asesoré a todo el grupo, de cuatro que éramos, de ponerse trajes cortos, para mantener la flotabilidad y no coger frío y aguantar más. Intercambié las gafas con un compañero de viaje al que agua le entraba, y era la primera vez que visitaban mares tan llenos de vida, y en segundos me ajusté las suyas sin ningún problema, iba a cien por ahora de un lado para otro, sin cansarme ni coger frío e indicando todo lo que veía por señas. Estrellas de mar, pez globo. loro, payaso, pez ángel y morenas. Como loca, sonreía a todos estos pececitos que tanto cariño les tengo y tanto tiempo había pasado sin verlos. Cuando ya más calmadita estaba, me detuve mirando un extraño coral. En su superficie una masa rugosa y simpática me miraba y yo le miraba a él sin saber qué era. ¡¡¡Era un hermosísimo pulpo!! Y pulpo, pulpo!!!!! grité a las cuatro olas, y mis compañeros vinieron corriendo. El pulpo, se quedó allí un rato, arrugándose y desarrugándose, y dio un saltó enorme y despegó de la roca a propulsión. Con los ojos bien abiertos nos quedamos viéndolo partir. \n\nDespués de relajarme, todos volvían para la embarcación, y yo más horas y horas hubiera estado allí, mirando a los pececitos y viendo a los pulpitos nadar. \n\nEn Bazaruto reposamos la comida. Bueno, reposar, reposar, no fue exactamente, que después de los bocatas, por las dunas subimos, bajo un sol abrasador y mirando nuestros pies clavados en la arena donde cada paso, significaba un pequeño paso para nadie, pero un gran paso personal. Al llegar arriba, el gran hallazgo personal tuvo lugar. A la árida arena, le seguía un húmedo verde hierba que se fundía con un cálido azul mar. Esta imagen, los ojos nos nubló y humedeció. \n\nAllí conocí una joven pareja de novios que andaban recorriendo el país de mochila durante dos meses. Con ella hablé un poco en español e inglés. Sonreía y sonreía, contándome aquella experiencia de viajar con su novio entre mochilas, chapas y viviendo al día. Con ellos y otro grupito de muchachos hicimos el siguiente snorkel pegados a las rocas, pues una fuerte corriente nos arrastraba. Yo iba aleteando pegadita a las rocas, donde la corriente era más ligera. De repente, vi asomar unas antenitas de una roca. Antenitas, no, ¡¡antenazas!!! y empecé a gritar, ¡¡¡Lobster, gran langosta!!!!!! Una gran langosta me había parecido ver. Cuando el grupo se iba aproximando, me di cuenta que se trataba de una planta y cuando todos llegaron, me encontraron partiéndome de risa, que casi me atraganto con el tubo y el agua. Todos rieron mucho. ¿No Lobster? ¡¡No-Lobs-ter!!! Era sólo una planta, pero una gran planta!!!!! Bueno, esta es simplemente una anécdota del viaje, pero es que me hacen mucha gracia estas cosas. ¡Ya ves! Las gafas de bucear, no las llevaba graduadas, pero la emoción muy elevada. \n\nCon esta pareja de novios nos volvimos a encontrar en otra ocasión. Ella me llamó a gritos y entre sonrisas todos nos mirábamos. “Perdona, ¿Cómo te llamabas?” Le volví a preguntar, pues muy mala soy para los nombres, que no para las caras. “Tengo un nombre un poco así de raro. Mi nombre viene a significar algo así como Tristeza. ¡Ya ves!, ¿en qué estarían pensando mis padres?” Y se partían los dos de risa. Tristeza sonreía mucho y hacía sonreír mucho a su joven marido, y nos hacía sonreír mucho a todos los que con ella hablaban. \n\nBazaruto dicen que es uno de los mejores fondos acuáticos y no buceé. ¡¡¡No buceé, pero lo disfruté enormemente a pocos metros!!! El buceo me lo guardo para la próxima vez que vuelva;)\n\nQue en Tofo, todavía recuerdo la de ballenitas que vi y escuché, emocionada, pues por todas partes salían, y la presencia cercana, aunque no la viera, del tiburón ballena. Fotos hice bajo el agua, con una cámara acuática de juguete. ¡¡Qué ilusión me hace verlas! No confío en que haya salido ninguna bien, por eso, confío más en el recuerdo de lo que viví en aquel momento. \n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n \n \n\n
sioc:created_at
  • 2009-09-01 18:10:34
is sioc:creator_of of
is opmo:effect of
sioc:has_container
sioc:has_creator
sioc:has_reply
opmo:pname
  • http://lacomunidad.elpais.com/africaverde2/2009/9/1/impresiones-mozambique-14- (xsd:anyURI)
sioc:title
  • Impresiones de Mozambique (14)
rdf:type

Metadata

Anon_0  
expand all