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 Antes de entrar en la Plaza de Oriente podéis visitar la catedral de Madrid, aunque para los madrileños ésta no sea, la genuína es la Catedral de San Isidro (también conocida como colegiata de San Isidro) en la calle Toledo ,más pequeña, menos "pomposa" pero con más solera. Del proyecto original del Marqués de Cubas se conservan algunas cosas en su interior, pero el exterior, ay amigos, el exterior os lo dejo a vuestro libre albedrio según podéis ver en las siguientes imágenes de la maqueta original a la foto de la actualidad.\n\n\n\n | \n | \n \nPero entremos en materia, nos adentramos en la Plaza de Oriente que durante mediados de los años 90 más páginas de prensa en contra del señor alcalde se han escrito y que como todas las cosas habrá quien lo aplauda y otros los desaplaudan.\n\n \n\n Don José Montero Alonso en el apartado a la plaza de Oriente y en el libro de Espasa "Madrid", lejos de tener conocimiento del cachondeo y destrozo innecesario que iba a haber en dicha plaza, decía: La plaza de Oriente es uno de los lugares madrileños que reúnen más auténticos valores de arte, de historia y de tradición. Cuando tantas zonas de la capital tienden a uniformarse, esta plaza mantiene, pese al espíritu nivelador del tiempo presente, su personalidad y estilo.\n\n¿Quien iba a decir que tan coqueta plaza por él reseñada iba a sufrir los desmanes de este insaciable alcalde que nos cayó en suerte?, con su manía de dejarnos Madrid como un queso Gruyére, sin meternos en si destrozó o no restos arqueológicos puesto que de esto más vale no hablar.\n\nMadrid fue fundada por Muhammad I (852-886), teniendo este carácter de fortificación militar: un Alcazar debajo del actual Palacio y una Almudaina bajo la actual catedral de la Almudena, todo ello fortificado, como se puede ver en las ruinas de la Cuesta de la Vega. Esta posición estratégica quedó incrementada con el reforzamiento de la frontera de la Marca Media que durante el siglo X Abd Al Rahman III llevó a cabo.\n\n Sin necesidad de repasar toda la historia, puesto que esto se lo dejamos a los historiadores, situándonos en la fachada de Palacio mirando hacia el Teatro Real abriéndose como de un abanico se tratase vemos las calles que hay en lugar de lo que fue en tiempos de Felipe V, cuando pensó hacerse este palacio, al incendiarse el Alcazar en aquella Navidad de 1.734\n\nRevisemos el Manual de Madrid del año 1.831 escrito por don Ramón de Mesonero y entre otras, referente al perímetro de la misma leemos esto: Madrid es escaso de plazas, y las que hay no corresponden en general al lustre de la capital, ni por la simetría de los edificios, ni por los monumentos que la decoran; se indicarán sin embargo las más principales.\n\n Plaza del mediodía del real palacio. Esta plaza es muy grande y casi cuadrada. La forma de un lado de la fachada principal del palacio; de lo opuesto a la armería, y de los otros dos un cuartelillo bajo y mezquino para la guardía de palacio hoy jardines de Sabatini, y una balaustrada con vistas al campo. Esta plaza sería magnífica si se reformase de un modo correspondiente al palacio de la fachada de la armería.\n\nEn la foto siguiente podemos apreciar la belleza de los jardines de Sabtini (también conocido como campo del Moro), debido a ese gran Alcalde que fue Carlos III y que tuvo la genial idea de hacerlos separándolos del rio Manzanares para incorporarlos al entorno inmediato del Palacio.\n\n En la primera operación para la apertura de esta hermosa plaza que ahora tenemos fue porque el amigo Bonaparte promulgó un decreto en el que ordenaba y mandaba el derribo de una serie de manzanas que se localizaban donde hoy está la Plaza de Oriente. El primero proyecto de ésta corrió a cargo del arquitecto Silvestre Pérez.\n\nFernando VII quiso reemplazar los derribos con la construcción de un teatro (no como otros que a correo seguido te harían un aparcamiento para vehículos).\n\n
HISTORIA DE LA CONSTRUCCION DE LA PLAZA DE ORIENTE\n\n 1.817 Se encarga el proyecto de ordenación de la plaza al arquitecto Isidro González Velázquez\n\n1.842 El Ayuntamiento presenta un informe redactado por varios ingenieros de caminos. En estos informes se especifica que la ordenación de seis manzanas estarán colocadas simétricamente y a igual distancia del eje del Palacio y Teatro.\n\n1.844 Dos años más tarde, se aprueba una Real Orden en el proyecto de ordenación de la Plaza de Oriente redactado por Narciso Pascual Colomer. Este proyecto es el que responde a la realidad actual de la plaza.\n\n1.847-50 Tiene lugar la subasta pública de los solares resultantes de la nueva ordenación\n\n1.850 Con proyecto de Rafael de León y Navarrete se redacta un proyecto para la construcción del número 1 de la Plaza de Oriente\n\n
\nPero los derribos ordenados por José Bonaparte no afectaron únicamente al recinto de la Plaza de Oriente, sino que se extendieron más allá de sus límites con la intención de abrir espacio en lo que hoy son las plazas de la Opera, Ramales y de la Encarnación que luego veremos en el transcurso del paseo.\n\nNos quejamos ahora de los espacios. En lo que hoy es la plaza de Opera había: diez manzanas enteras, tres parciales, trece calles y seis plazuelas. Todo esto se lo cargó Bonaparte con la intención de "ordenar" los alrededores de Palacio.\n\n Antes de continuar el paseo, si tenéis necesidad de tomar un refrigerio, sentaros en el café de Oriente que es lo primero que os vais a encontrar.\n\n\n\n\n\n\n\n\n
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