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 Aeropuerto de Barcelona, en tránsito, paso ágil directa a puerta de embarque, y de repente, mis tacones chirrían... y es que les cambio el paso, los clavo en un suelo que por cierto parece el de un gran, inmenso salón de baile. Y lo veo... un letrero rojo, en una tienda del aeropuerto en el hall central del que arrancan las direcciones hacia las diferentes areas de embarque. Suspendido de un hilo, como la pita, desde el techo, todo el cartel rojo y las letras blancas, diferentes tipografías y tamaños, que van variando a medida que varía el idioma, pero una solo frase... Un beso lo cura todo... yo me clavo en el suelo, miro el cartel, asiento y sonrío con una gran gran sonrisa, inmensa mi sonrisa. Francés, portugués, inglés, no recuerdo cuantas veces llegaba a aparecer la frase en diferentes idiomas, muchas. Quiero continuar observándolo, pero no hay tiempo, y mi sonrisa me acompaña a la puerta de embarque.\n\n\n\nMilán. El cuadrilátero. Lo más de la moda y del diseño. Me quedo con un escaparate, el que más sonrisas me ha arrancado entre decenas y decenas de grandes diseñadores. En Monte Napoleone... libros antiguos. En realidad, dos escaparates prácticamente seguidos. Del mejor lamentablemente no tengo fotografía, pero conseguí sacar ésta.\n\n \n\n \n\n\n\n\n\n \n\n
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