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 El Mundial de Fútbol 2010 acaba de dar comienzo lo que significa que durante casi un mes estaremos obligados a convivir, lo queramos o no, con toneladas de información que intentarán darnos a conocer todos los detalles de lo que en Sudáfrica se está viviendo estos días.\n\nSin embargo, y aunque la mayoría de nosotros seguimos con nuestras rutinas a pesar de la inagutación de la competición deportiva, todos podemos sentir como estos días el ambiente futbolísitco invade nuestra cotidaneidad. El deporte rey y "la exaltación nacional" (en el sentido más positivo  que pueda tener esa expresión) están por todos sitios. \n\nAsí, en Inglaterra hoy es imposible pasear ajeno a lo que está aconteciendo en Sudáfrica porque la simbología nacional se entremezcla con los aspectos más sencillos del día a día. Pasteles con la bandera de la selección; maniquís con la camiseta roji-blanca; bares anunciando sus pantallas gigantes - incluso perritos calientes gratis en el descanso -; globos con los colores nacionales; grandes pancartas en el metro; niños y mayores con las camisetas de su equipos. Y sobre todo banderas, cientos de miles de banderas colgadas de ventanas, puertas y ventanillas de coches.\n\nLo queramos o no, el Mundial está ya aquí y lo único que podemos hacer es disfrutar del espetáculo, pierda o gana nuestro equipo, porque lo importante es el espíritu  internacional, el hermanimiento entre pueblos y la posibilidad de acercarse a otras culturas.\n\nEso sí, a pesar del descalabro de hoy, no nos falta el ánimo. Hoy más que nunca estamos con la roja. ¡A por ellos chicos! \n\n \n\n \n\n\n
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