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¿A dónde lleva el camino? Quizá no lleve a ninguna parte, sólo a encontrar otro camino. Pero si permanecemos atentos, tranquilamente atentos mientras caminamos, puede que se nos cruce un desierto de nieve, un desbordante palacio, unas gotas de agua huérfanas, unas sombras atractivas, un ave quejumbrosa, una curiosa celosía, una escalera en el cielo o una calle misteriosa.\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n