PropertyValue
opmo:account
is sioc:container_of of
sioc:content
  • Así como el día sucede a la noche, primero debe haber sopa para proceder a la creación de esta joya negra. Se vierte en un sartén, donde el aceite de oliva se bate con los dientes de ajo en un peculiar combate como apertura del proceso de lenta reducción cuya contradicción nos lleva a dimensiones inauditas de sabor concentrado a potencias insoslayables produciendo una crema de gran personalidad.\n\nSimilar a la brea, con toda la delicia amorfa donde la forma no sigue el sabor, con una textura única que le permite cubrir un amplio rango de tareas tan simples como una salsa inédita de pasta en compañía de la sublime Napolitana o convertirse en el relleno de una arepa que se sitúa en el olimpo de los platos universales que parte de la esquina de Cervecería a Coliseo, sede de la mítica Arepería Alaska, donde al igual que Kronos, se comían las creaciones del otro mundo.\n\nEste campo es en el cual nuestra cocinera no tiene competencia y ella lo sabe. Se trata de una génesis que como todas se inicia con el verbo. María le habla a la harina de maíz mientras le vierte los componentes conocidos, el agua y otras sustancias, que combinan perfecta y lentamente con sus logros y sueños, las travesuras de los hijos en debida proporción con los desamores por un buen tiempo mientras la masa gana textura a fuerza de pasión, empeño y amor, hasta que a fuerza del diálogo sordo, sostenido y especialmente íntimo, es ésta la que le responde sólo a su amasadora.\n\nSe consuelan mutuamente, lágrimas aderezan mágicamente el cuerpo en formación que se viene entre las manos redondas y hermosas de esta trabajadora del sabor. Más nadie puede entender lo que se habla entre ellas, pero cualquiera puede entender por el lenguaje de las formas como fluye de un cuerpo al otro la energía vital que nos ha colocado como humanidad en lo más alto de nuestra escala, la pasión. Sólo cuando ambas consideran que el diálogo cotidiano ha cumplido la misión de equilibrar la vida compartida, viene el reposo, seguido del conformado que no acepta otras manos sino las mismas que le dieron vida en primera instancia.\n\nArepas hermosas, perfectas y bondadosas esperan muy ordenadamente su cocción a la intensa brasa. En apenas muy pocas horas, esos panes del amor, con toda su tradición indígena y la cultura de pueblos dedicados a la mazorca y sus dorados granos, luego de abombarse, con costras crujientes y de corazón humeante, reciben una gama de rellenos que se funden o se integran con su transporte en el último viaje del sabor en boca de asiduos comensales.\n\nLa semana se inicia entonces con arepa de caraotas refritas en cuya preparación se hacen presentes paticas de cochino, ajo y demás ingredientes capaces de olvidar el día a quienes la prueban, especialmente en compañía del queso blanco llanero, el cual se raya sobre el relleno oscuro.\n\nLa cara de satisfacción de los clientes brinda a María todo lo que ella necesita para continuar brillando en su vida, a pesar de lo fatigosa, en este amasado de alegría colocado al alcance de quienes tienen la fortuna de incorporarla a sus vidas.\n\nsigue.../..\n\n
sioc:created_at
  • 2010-12-06 01:39:01
is sioc:creator_of of
is opmo:effect of
sioc:has_container
sioc:has_creator
opmo:pname
  • http://lacomunidad.elpais.com/fcatus/2010/12/6/arepa-nuestra-ii (xsd:anyURI)
sioc:title
  • Arepa nuestra - II
rdf:type

Metadata

Anon_0  
expand all