LACOMUNIDAD.ELPAIS.COM_JOSEMANURIESGO_2008_12_30_EL-TERROR-LA-MANIVELA

En un principio el arranque de los motores se realizaba mediante el procedimiento conocido de la manivela. La potencia necesaria para impulsar las manivelas de arranque hacían que cualquiera no estaba facultado para poner en marcha un coche. Los contragolpes eran peligrosos y eran causa de multitud de accidentes. Había que tener una dosis importante de fuerza y pericia para conseguir que aquello empezase a funcionar. Por supuesto era impensable que las mujeres pudieran realizar la maniobra de arranque que naturalmente realizaban con la ayuda de un fornido varón. Se probaron todo tipo de técnicas para conseguir que el arranque manual quedara superado. Las técnicas basadas en la electricidad tenían serias dificultades para prosperar debido al tamaño de los motores eléctricos y a que su accionamiento agotaba las baterías en el primer intento. Fue en 1912 cuando Cadillac, en colaboración con Delco, consiguió combinar el tamaño de lo motores y el consumo eléctrico al conseguir, con un generador de gran potencia y consumo moderado, efectuar el ataque del arranque sobre un volante de motor dentado. La técnica perdura hoy en día y las mujeres pudieron incorporarse con libertad de movimientos al apasionante mundo del automóvil.\n\n

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