LACOMUNIDAD.ELPAIS.COM_LORENZO_2008_1_23_LA-VIDA-ES-TIEMPO-Y-MI-TIEMPO-ES-VIAJAR

La vida es tiempo y para un buen viajero/a, todo su tiempo libre lo invierte en viajar. No obstante, fruto del post anterior, donde se suscitó el debate si viajar es un lujo, y por tanto, como lujo, un gasto excesivo, he estado reflexionando si resulta inmoral gastar tanto para viajar cuando en muchos países a los que viajamos con parte de ese dinero podrían vivir muchas familias todo un año. \n\n

Podríamos emplear ese dinero en paliar el sufrimiento humano, ¿no?. Estos pensamientos me han asaltado durante algunos viajes, sobretodo cuando personas necesitadas se acercaban a mi pidiendo limosna en países ya de por si pobres. Alguna vez he dado lo que tenía en los bolsillos, ahora recuerdo una vez, en Tamanraset, en el sur de Argelia, cuando un minusválido se acercó a mi con la mano extendida. Pero no suelo dar limosna por varias razones. Primera por viajar con un presupuesto ajustado. Si diese limosna tendría que volver antes a casa. También pienso que si doy limosna se acostumbra, en muchas ocasiones, a asociar viajero con pedir dinero. Y también porque pienso que viajando ya doy mi colaboración a quien allí trabaja, alojándome en lugares locales, tomándome un refresco, cogiendo transportes públicos, etc.\n\n

Casi todo el dinero que ahorro trabajando lo empleo íntegramente en mis viajes. Es más, lo que me sobra, lo ahorro para dejar pronto de trabajar y así poder viajar más tiempo y más lejos. E intento ser recatado en mis gastos y mi único vicio es viajar. Intento no gastar mucho en mis viajes, aunque todavía me queda mucho que aprender y estarme de algún capricho, como por ejemplo, ir a un buen hotel después de unos días durmiendo en lugares de dudosa salubridad tras los cuales te pica todo el cuerpo y necesitas una buena ducha y una cama con sábanas limpias. Además, creo que lo que suelo gastar en mis viajes, lo gastaría en casa sin viajar, solo en comer, gasolina, suministros de casa y vestir.\n\nNo obstante, a veces me siento culpable de negar limosna a necesitados e incluso he pensado que en lugar de viajar podría dedicar mi dinero, y así expiar mi falta, en crear una ONG o colaborar en la creación de una escuela en algún lugar donde se necesite, etc. \n\nPero un día leí una frase en un libro de un gran viajero, de escasos recursos, que decía que todo lo que contribuye a elevar el alma es bueno y todo lo que lo obstaculiza a elevar el ser es malo. Y viajando consigo elevar mi alma, siento el mundo entero a mi disposición, lo entiendo mejor, me entiendo a mi mejor, contemplo las bellezas del planeta tierra, y de todos los que la componen, voy a lugares y me sumerjo en océanos observando maravillas que pocos humanos imaginan siquiera que existan. Gozo de una vida bella e intensa y amo al mundo entero.\n\nPor ello solo puedo decir gracias y mil gracias por poder viajar y extraer de los viajes todas estas increíbles enseñanzas que me ayudan a vivir correctamente. \n\n

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