Cuando llegué a Hawai nadie me puso un collar de flores en el cuello (eso solo está reservado para los que viajan con tour operadores y quien les coloca las flores ya no es una hawaiana con falda de palma y cocos en los pechos) lo digo por si alguien ve mucha tele y se lo cree todo.No fue fácil entrar en las Islas de Hawai. De hecho me tuve que quedar un día más en Australia sin pretenderlo. La situación que viví en el aeropuerto de Sydney fue de chiste. Sabía que para entrar a Estados Unidos debía tener un billete de salida del país más el visado tramitado por Internet. Tenía las dos cosas pero ¿qué sucedió? Pues que mi vuelo de salida de Estados Unidos era hacia la Isla francesa de Gudalupe, en el Caribe. Pues bien, la compañía aérea no sabía que existiese una isla llamada Guadalupe y cuando les dije que era francesa me dijeron: ¿en la Polinesia?. Yo estupefacto les contesto que no, que en el Caribe. La buscan y rebuscan y no la encuentran. Ya me veis desplegar el mapamundi que llevo conmigo y se la enseño. Ahora ya estamos tres empleados de la aerolínea y yo. Me tienen media hora esperando para finalmente decirme que según su ordenador no me vale ese vuelo de salida. Les explico que no me voy a quedar en Estados Unidos, que tengo la salida hacia una isla francesa y por lo tanto europea y yo también soy europeo. Pues no sirvieron de nada mis argumentos. Y todavía tuve que oir que me hacían un favor aplazándome el vuelo para el día siguiente si solucionaba mi continuación del viaje hacia mi país. \n\n
Increíble pero cierto. Volví a Sydney y con intenet busqué vuelos baratos. Estuve a punto de imprimir un billete electrónico ficticio (se que a algún viajero le ha funcionado, pues no siempre comprueban si finalmente lo has comprado) pero claro, soy jurista y eso iba contra mis principios, pero a la vez pensaba que la situación era absurda pues tenía que comprar un vuelo que no utilizaría cuando en realidad tenía otro de salida de Estados Unidos en noviembre hacia el Caribe. Finalmente tras buscar y buscar encontré una ganga por algo más de doscientos euros con Air Berlin y cuatro escalas de Miami a Barcelona. Por si acaso lo compré para el 20 de diciembre, por si me entra nostalgia y deseo utilizarlo. Pero no creo que sea el caso estando navegando y visitando las islas caribeñas haciendo un frío que pela en mi tierra. \n\n
El billete les convenció y así pude entrar en Honolulu, en la isla de O’aho en Hawai. Allí visité la Isla en autobús que por cinco dolares puedes recorrer toda la isla y bajarte del autobús donde quieras y volverlo a coger. Recorrí la Honolulu y la famosa playa de Waikiki. Pero encontré esta isla demasiado turística y exenta de la cultura autóctona que buscaba. Pensaba que nada más bajar del avión vería danzas polinésicas y cuerpos contorneandose al son de la suave música con una falda de paja y un collar de flores. Pero solo vi mcdonals y cadenas alimentícias similares. La cultura había quedado relegada a un consumo turístico más. Si pagabas podías ver un espectáculo teatralizado expreso para ti. Me negué en redondo. Pero sin saberlo me tropecé con uno en unos grandes almacenes donde para llamar la atención de la clientela montaban un espectáculo polinesio. Que triste pensé.\n
Me fui pitando de la isla de O’ahu y me fui hacia la isla de Kauai. Tampoco encontraría la cultura hawaiana pero al menos si que me recompensarían los inmensos paisajes de esta pequeña isla. Preciosos y magníficos cañones formados por la actividad volcánica. Costas recortadas con enormes acantilados que caían a cientos de metros y verticales al mar. Cataratas enormes y ríos que serpenteaban entre frondosa vegetación. Kauai me encantó, al menos pude hacer algunas caminatas muy bonitas.\n\n
\nDe Kauai me fui a la Isla de Maui que también me gustó mucho. Volcánica también su Parque Nacional de Haleaakala, con muchísimos cráteres durmiendo un largo sueño que en cualquier momento puede despertar. Y pude caminar entre ellos y fue precioso. \n
Aunque he leído que los volcanes hawaianos son de buen despertar, pues son “implosivos” pues van dejando ir sus gases y cuando entran en actividad lo hacen derramando lava lentamente. En cambio, el Monte Fuji en Japón es un volcán “explosivo” retiene todos los gases y cuando entre en erupción mejor encontrarse lejos de allí. Muy lejos. Maui también tiene carreteras escénicas preciosas con cientos de curvas que pasan entre bosques de bambú y de frondosa vegetación tropical, con ríos y cascadas que caen al mar. Y una costa con caprichos como este sifón de agua marina y este inmenso corazón que os envío.\n\n
\nMi siguiente etapa la isla de Hawaii o también llamada la Big Island, donde hay volcanes en actividad. Hasta pronto. \n\n\n\n\n\n\n\n\n
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