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Caminado por los campos de la vida, emboscado en un recodo de la vereda, me asaltó el mismísimo “Paso del Tiempo”.\n\n
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Creyendo que había llegado mi hora, con voz temblorosa le pregunté._ ¿Vienes a llevarme? ¡Todavía soy muy joven!\n\n
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_ No soy La Muerte, me dijo, soy el Tiempo, aunque yo siego más vidas con la paciencia que la muerte con su guadaña.\n\n
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_ Entonces ¿Qué quieres de mí?\n\n
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_ Vengo a enseñarte un espejo._ Me mostró un espejo, y sorprendentemente, en vez de verme reflejado en él, vi a un anciano triste, con un rostro arrugado, curtido por las amarguras de la vida y el brillo de sus ojos lejano y apagado,. En aquel mapa de la vida, solo se podían adivinar unas pocas arrugas modeladas por algunas risas ya olvidadas, el resto, aflicciones.\n.\n
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Le pregunté al Paso del Tiempo_ ¿Por qué no me veo en el espejo? ¿Quién es este anciano que se refleja en mi lugar? Ni si quiera se parece a mi. \n.\n
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El paso del tiempo sonrió y dijo_ Este espejo no refleja los rostros.\n\n
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_ ¿Entonces que es lo que refleja?\n\n
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Me miró a los ojos y me respondió: _LAS ALMAS\n\n.\n\n\n.\n\n\n\n Ríe, baila, canta, juega, haz el amor, viaja, vive!!! Pero hazlo hoy…\n\n
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MAÑANA ES TARDE!!!!!\n\n\n\n
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