|
sioc:content
|
-
 \nHace un par de años han puesto este ascensor para bajar a la playa.\nDecididamente este pueblo es ya como una residencia de la tercera edad.\nEl caso es que si antes se llenaba de gente cuando asomaba el sol, ahora la cosa es exagerada.\nA primera hora pasan por la calle cargados con las bolsas, sillas y niños.\nHacia media tarde los que antes buscaban refrescos y patatas por los baresque hay junto a la playa, ahora toman el ascensor y se suben a lastiendas y al mercado.\nEstá todo irreconocible y las colas que se montan en los tienduchos que ahora venden ya los bocadillos hechos son interminables.\nEn cuanto pasan la hogueras de San Juan empiezan los preparativos para las paellas que serán el 22 de julio.\nA partir de ahí es la desbandada.\nSe marchan de vacaciones y quedan, quedamos, los de siempre.\nY salvo alteraciones transitorias (las espantosas fiestas de San Ignacio) vuelve la tranquilidad al pueblo.\n\nAhora es momento de guardar, como sea, la calma.\nHayque tener paciencia con todo, con los coches aparcados delante delgaraje, las colas, los gritos, las calles intransitables con niñosjugando por todas partes, las terrazas repletas, las motos con ruidosinfernales tambaleándose con gente encima como en castellets, loscoches con gentes moviendo la cabeza dentro y las músicas saliendo porlas ventanas abiertas, los colorines, las carnes, los dedos de lospiés...\n\nPaciencia...\n
|
![[This page as RDF]](http://webenemasuno.linkeddata.es/static/rdf-icon.gif){kind=icon}