LACOMUNIDAD.ELPAIS.COM_PACIFISTA_2010_12_2_LA-PALABRA-HOY-2-DICIEMBRE-2010

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Ten compasión de mí, Señor;\n mira cómo me afligen los que me odian.\n Sácame de las puertas de la muerte,\n para que en las puertas de Jerusalén\n proclame tus alabanzas y me regocije en tu salvación.\nSalmos 9:13-14\n\n

La compasión es una emoción que los seres humanos sienten cuando son enfrentados por el sufrimiento de otros y usualmente está acompañada por una necesidad o un deseo de ayudar a mitigar ese sufrimiento. Es a la vez una demostración fehaciente del amor que habita en una persona hacia sus congéneres. Uno de los atributos de Dios es su compasión y cuando nosotros sentimos compasión por otros estamos aproximándonos a la naturaleza divina. Por compasión el Señor Jesús sanó multitudes de enfermos y multiplicó los panes y los peces para darles alimento físico. Por compasión por la humanidad el Señor Jesús entregó su vida por nosotros para librarnos del pecado y de la muerte. En el magistral sermón del monte el Señor Jesús declaró que las personas que son compasivas serán tratadas con compasión y por lo tanto son personas dichosas. La sabiduría celestial, la que viene de arriba, está llena de compasión por lo que no se puede ser sabio si esta emoción no forma parte integral de nuestro ser.\n\n

¿Como está nuestro tanque de combustible de la compasión? ¿La aguja del indicador del nivel de combustible de la compasión está cerca de la F o de la E?\n\n

Este indicador de nivel de la compasión también mide nuestra madurez espiritual. Si la aguja indica un nivel bajo debemos revisar nuestra lista de valores a la luz de la palabra de Dios. Cualquier discrepancia entre nuestra lista y los mandamientos de Dios es una brecha que debe ser corregida lo más pronto posible. Aprovechemos pues este termómetro de la espiritualidad para avanzar más en nuestro camino a la meta de la semejanza a Cristo. ¡Sólo a Dios sea la gloria!\n\n