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Hola,\n\naquí estamos. Nos acabamos de despertar hace un rato, ¿a estas horas? a las 6 de la mañana, sí. Y es que os voy a intentar contar cronológicamente, si esto es posible, nuestro viaje de ida. Nuestro primer viaje de ida. Bienvenidos al cumpleaños más largo de la historia.\nLlegamos a París a primera hora de la mañana. Debido a un (¿extraño?) retraso en Barajas nos demoramos una media hora. Tiempo justo para perder el primer avión a Los Ángeles. Ahí yo ya me frotaba las manos y pensaba: "Esto promete. Me siento como en casa. Así dará tiempo a que me soben mejor en los controles." Dicho y hecho.\nHe de decir que con respecto a los controles todo ha ido como la seda. Ni una objeción me han hecho, mientras que a Iris le han cacheado un par de veces y le han registrado el bolso alguna que otra vez. Victoria moral para Miguel, que bailaba haciendo el robot en una esquina celebrando la reinserción en la sociedad.\nSin embargo, si vas a USA no estás exento de los cacheos. Yo ya no recuerdo cuántos nos hicieron. Al final me sentí un poco Lola Flores y me dieron ganas de decir: "Si me queréi, irse!".\nEl último me lo practicó un armario ropero 2x2 que me exprimió como a una fruta. Yo creo que me notó los hierros del brazo. Pero para ser justo, reconozco que ha ido todo como la seda. Demasiado bien diría yo. Empiezo a sospechar. ¿Qué me tenéis preparado, Gobierno de los EEUU? ¿¿Qué queréis de mí??\n A eso de las siete de la tarde aquí conseguimos llegar al Motel (sí sí, Motel) en el que estamos en Santa Mónica, a tiro de piedra de LA. Salimos a cenar algo y, como estos americanos son como son, entramos en un fast food de gambas... No digo más.\nAhora nos vamos. Mañana os contamos.\nBesos de ambos dos.\n\np.d. Prometo dejar a Iris escribir...creo...
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