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Esta mañana me han mandado un e-mail con este chiste, que nos cuenta las peripecias de un párroco de pueblo con su supuesta "maternidad". \n\nLa rocambolesca historia viene a poner la nota cómica a un tema de rabiosa actualidad, el de los hijos de los curas. \n\nEl diario El País en su edición de ayer publicaba esta noticia, aparecida en el diario italiano La Stampade EL HIJO DEL CURA LLEVARÁ SU APELLIDO\n\nSegún este rotativo italiano El Vaticano estudia reformas legales para que la prole de los sacerdotes pueda heredar sus bienes, y el debate reactiva la batalla por el celibato. \n\nLa noticia, aunque parece ser que fue desmentida desde Roma, podría significar que algo se esta moviendo y que podríamos estar en el principio del fin de la absurda y antinatural "Ley del Celibato". ASÍ SEA !!!!\n\n
\n EL PÁRROCO  Un buen día, el párroco de un pueblo se encontró indispuesto con unos fortísimos dolores abdominales. Dado el grave estado en el que se encontraba, le trasladaron a la residencia, donde fue intervenido con urgencia.\n\nMientras el cura se encontraba dormido por los efectos de la anestesia, en la habitación de al lado una joven madre soltera daba a luz un precioso retoño. Desgraciadamente, la joven madre murió y el equipo medico se planteo qué hacer con el niño.\n\nUno de los médicos, tras mucho cavilar, dijo:\n\n-"Mirad, vamos a adjudicárselo al cura, al fin y al cabo, el hombre le dará una buena educación".\n\nDicho y hecho, al despertar el párroco se encontró con el bebe en su regazo, asustado preguntó:\n\n-"¿Pero esto que es?".\n\nEl medico se acercó y le dijo:\n\n-"Mire, este es el origen de sus dolores de barriga...".\n\n-"Pero, si esto es imposible" dijo el cura.\n\nEl médico le respondió:\n\n-"No, hombre, con lo que han evolucionado los tiempos, ahora los hombres se pueden quedar embarazados...".\n\nEl cura se quedo pensativo decidiendo que hacer con el niño. Y pensó:\n\n-"Bueno, cuando vuelva al pueblo, diré que es hijo de una hermana mía que ha fallecido y yo me haré cargo de educarlo".\n\nEl párroco volvió así al pueblo y contó su historia. No sin algún recelo, los habitantes del pueblo se acostumbraron a ver a partir de aquel día al nuevo vecino que fue bautizado con el nombre de Juan.\n\nPasaron los años y el cura se hizo muy mayor. Cuando Juan contaba 25 años, el cura enfermo y, en su lecho de muerte, dijo:\n\n-"¡Que venga Juan! !Que venga Juan!".\n\nEl joven corrió al lado del cura:\n\n-"¿Que quiere tío?",\n\nEl cura, haciendo acopio de valor le dijo:\n\n-"Mira Juan, tengo un gran secreto que contarte, y antes de morir debo decírtelo...".\n\nJuan interrumpió al párroco y le dijo:\n\n-"Tranquilo tío, no hace falta, desde hace años ya me he imaginado que en realidad es usted mi padre".\n\nY armándose de valor el cura le dice:\n\n-"¡NO!..... Yo soy tu madre...., ¡Tu padre es el Arzobispo de Cuenca!. \n\n\n\n\n\n
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