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El País se ha apuntado un tanto periodístico al mostrar un vídeo del accidente de hace unas semanas en Barajas. Con ello, también ha perdido un poco más de seriedad, al mostrar una prueba en una investigación que hasta el momento es confidencial y que debería seguir siéndolo hasta que se aclaren las cosas. Es la gota que colma el vaso. Las filtraciones de datos preliminares, primero en periódicos americanos, luego en los españoles, ha sido constante, hasta llegar a la desvergüenza de dar a conocer un borrador de la comisión de investigación que ni siquiera había sido aprobado ni era definitivo. Los medios de comunicación estarán muy contentos por sus "exclusivas", pero está claro que están siendo utilizados. Alguien tiene interés en que ciertos datos se conozcan y en que cierta versión tome cuerpo. Algunos dicen que el gobierno quiere desviar la atención, otros que Boeing intenta echar la culpa a Spanair para evitar cualquier problema con ese modelo, visto que los abogados americanos ya vuelan en círculos sobre sus cabezas. \n\nSea como sea, el papelón de la prensa es impresentable. Aún peor es el de aquellos que están filtrando datos, haciendo dudar de la misma seriedad de la comisión. En estos tiempos parece que es imposible tener un poco de paciencia y dejar que se hagan bien las cosas. Parece que no recuerdan casos como el del Concorde accidentado en París, cuando las primeras hipótesis nada tuvieron que ver con la explicación que al final se dio por buena. Aquí puede pasar lo mismo: ya nadie se acuerda de las primeras "informaciones" de un fallo del motor. El avión es un medio muy seguro y los límites de seguridad amplios, en casi todos los accidentes intervienen varios factores de forma simultánea. Veremos en qué acaba este caso y antes de darnos prisa en echar culpas a diestro y siniestro, tengamos todos los datos en la mano.\n
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