El día anterior decidimos que a la vuelta de Patán el taxista nos llevara hasta la estación de autobuses de la ciudad para sacar los billetes para ir hasta Pokhara. Cuando llegamos cual fue nuestra sorpresa que nada de Inglés, todo esta escrito en nepalí y que es imposible encontrar nada a no ser que preguntes. \n\n\n
Consultamos los horarios y vimos el estado de los autobuses que salían para nuestra siguiente ciudad destino y decidimos probar en otro momento la experiencia de viajara en estos autobuses y nos dirigimos hasta la Greenline, línea de autobuses para turistas y personas con dinero que pueden pagar hasta 1000 rupias por trayecto Kathmandú-Pokhara.\n\n\n\n
El viaje un pequeño infierno, 10h de bus para hacer 100km. por carreteras que no vieron en su día una apisonadora y por donde en sitios no caben dos vehículos a la vez por lo que se tienen que poner de acuerdo constantemente para ir cruzando uno primero y otro después. El viaje incluía la comida en un pequeño Risort para turistas que agradecimos por el mero hecho de bajarnos del autobús aquel.\n \n
De igual manera a la llegada te esperan decenas de taxistas que te ofrecen alojamiento y transporte hasta el centro de la ciudad. Tras un pequeño regateo accedimos a ver un hotel que por 300 rupias el día nos incluía el traslado del taxi. Se llamaba Hotel Lake Diamond y lo regentaba una familia de Nepalís súper agradables y serviciales.\n\n\n
El primer día en Pokhara las pasé canutas, me subió la fiebre y la colitis fue de campeonato. La familia del hotel me subió a la habitación un plato de Dal Bath para cenar pero no podía ingerir nada, bastante tenia con pasar la fiebre entre duchas de agua fría.\n\n
Me acosté esperándome levantar en mejores condiciones para poder iniciar el trekking que teníamos previsto.\n\n
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