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Y contentos nosotros de tenerte, como a tal. Mi respuesta ha tardado no por efecto de la duda sino por un apoteósico catarro con fiebre incluida.\n\nSimplificando un poco, te diré que toda arquitectura debe ser funcional. Otra cosa es lo que consideremos funcional. Hace muchos años, en las Escuelas de Arquitectura, se simplificaba esta cuestión con la dicotomía Forma/Función como si fueran esencialmente antagónicas. Eran ganas de clasificar a ultranza. También era una forma de molestar al futuro arquitecto llamándole "formalista", como una de las ofensas más en boga, pues indicaba que dibujaba líneas sin que hubiera una función específica que las justificara.\n\nEs evidente que en un hospital los recorridos de las diferentes circulaciones deben ser innegociables frente a otras consideraciones pero, en general, la arquitectura debe considerar tanto los elementos llamados "funcionales" como los "formales".\n\n¿Y el lujo que mencionas?. Pues volvemos a enfrentarnos con el concepto de la palabra. Si se refiere a signo de ostentación o riqueza de apariencia, ¡anatema sea!. Si se refiere a lo que está fuera de lo intrínsecamente necesario para subsistir, debemos considerarlo pues todos sabemos que no sólo de pan vive el hombre (y menos, la mujer).\n\n\n
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