\n\n Los siglos XX y XXI han visto la sustitución de los templos destinados a Dios por templos dedicados al cuerpo y sus competiciones. Que sea para bien. Este es un pequeño templo de un pueblo pequeño.\n\n
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El principal reto fue evitar la imagen de “caja” cerrada. Por ello, los tres lados que rodean la pista están abiertos a ella y uno de ellos abierto a un paseo desde el que se puede ver el partido, si éste es interesante, y desde el interior ver el paseo si el partido es aburrido.\n\n
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La persiana horizontal en el techo crea la sensación de “visillo” que tamiza la iluminación cenital. Interior y exterior tienen el mismo tratamiento de materiales.\n\n
. \n\n Pabellón polideportivo de Castelló d’Empúries\n\n