LACOMUNIDAD.ELPAIS.COM_AA-ALBORS-ARQUITECTO_2008_12_27_UNA-FORMULA-MAGICA

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Esta fórmula de Albert Einstein corresponde al enunciado de la teoría de la relatividad y establece la relación entre masa y energía de un cuerpo en reposo. En ella:\n\n

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Pero ¿qué ocurre si ese cuerpo somos nosotros? ¿La fórmula seguiría siendo válida? \n\n\n\n

Sustituyamos los parámetros del enunciado por otros tales como éstos:\n\n

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e: esperanza\n\n

m: mansedumbre\n\n

c: credulidad\n\n

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Indudablemente, la relación se cumple: ¿Cuántas veces nuestras esperanzas no han sido fruto de nuestra mansedumbre multiplicada por el cuadrado de nuestra credulidad?. La fórmula es cierta. \n\n

Pero para que lo sea científicamente, debe cumplirse en todos los casos. \n\n

Y ¿cuántas veces hemos comprobado que el resultado no correspondía, no sólo a nuestras expectativas (cosa fácil) sino a las más estrictas leyes de la lógica y el comportamiento humanos.\n\n\n\n

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Por ello, he probado en alterar los signos de esos parámetros, por ver si se seguía cumpliendo la fórmula inicial. Veamos:\n\n

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Matemáticamente, la fórmula sigue siendo cierta, pero ¿sigue siéndolo en nuestro vivir cotidiano? \n\n\n\n

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Para comprobarlo, adjudiquemos una nueva acepción al valor negativo de los parámetros iniciales:\n\n

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- e = desespero = d\n\n

- m = rebelión = r\n\n

- c = incredulidad = i\n\n

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En este caso:\n\n

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Y su enunciado diría: \n\n\n\n

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“El valor de nuestra desesperación es equivalente a nuestro espíritu de rebelión multiplicado por el cuadrado de nuestra credulidad o incredulidad" (multiplicada por sí misma, el signo no afecta al resultado).\n\n

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Y dado que eso es tan cierto como que “el valor de nuestras esperanzas equivalen a nuestra mansedumbre multiplicada por el cuadrado de nuestra credulidad”, la fórmula es válida en todos los casos, como queríamos demostrar.\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n\n